“Fueron una banda incómoda... De hecho, cuando Luca empezaba a hablar de Charly y de Spinetta no era algo que le gustara a lo que puede ser la oficialidad del rock argentino”, dice Oscar Jalil en referencia a Sumo. Si el grupo fue un grano en el terso cutis del rock posdictadura, para la literatura tampoco resultó una materia sencilla de asaltar. De los Redondos, el otro fenómeno contracultural elevado por la adoración de sus fans a cumbres masivas, insospechadas para sus propios miembros, hay una nutrida y variopinta oferta literaria. Con Sumo y con Luca Prodan cuesta mucho más, de allí la expectativa generada por “Libertad divino tesoro”, biografía en la que Jalil se metió en la piel del frontman único y absolutamente irrepetible.

Sostiene Jalil: “Sumo creó un vínculo con la gente en cuanto a la autenticidad, esa cuestión de ir a un recital y ver a Luca en la puerta hablando con la gente, eso lo cuentan los que lo vieron de cerca. Un tipo que cuando se subía al escenario era como Jim Morrison y después te estaba pidiendo un pucho”. Para deconstruir a semejante personaje fueron necesarias 80 entrevistas, gente que narró la vida de Prodan desde la cuna italiana al sepelio porteño, recorriendo la infinidad de estaciones repartidas por el camino.

“Libertad divino tesoro” (título que juega con la letra de “Los viejos vinagres”) fue editado por Planeta y aterrizó hace algunos días en Tucumán. Es un generoso volumen de 524 páginas que compendia la palabra de testigos claves de esa apasionada aventura que fue la vida de Prodan. Jalil habló con la familia de Luca, con sus amigos, con sus mujeres, con sus compañeros de Sumo y con todo aquel que tuviera algo interesante y novedoso que contar. Tratándose de Prodan, todo era fuera de lo común.

Entre las indagaciones que el periodismo ensayó sobre el líder de Sumo hizo punta “Luca: un ciego guiando a los ciegos”. El libro de Carlos Polimeni salió en 1993 y pasó ya por varias reediciones. Incluye reportajes a Luca y una carta que le dedica Timmy McKern, anfitrión de Prodan en las sierras cordobesas, manager y uno de sus incondicionales. Polimeni sostiene que, por sobre todo, Luca era un artista, y que el mito surgió durante la década del 90. Apunta Polimeni que cuando Luca murió, en 1987, los medios prácticamente ignoraron la noticia.

Editado por Clarín, en 2007 se editó un libro sobre la historia de Sumo (con ese título; lo vendían acompañado por un CD). El periodista especializado Eduardo Berti escribió sobre Luca; mientras que el enfoque de la banda fue obra de Alfredo Rosso. Muy difíciles de conseguir son, en tanto, “Sumo. Historia, fotos, reportajes, letras” (1994) y “El grito del final-La vida trágica y la muerte vital de Luca Prodan” (Marcos Mellet, 1993).

La mirada interior a la banda estuvo a cargo de uno de sus integrantes. “Sumo por Pettinato” (1993) constituye un riquísimo y divertido anecdotario de la vida del grupo, tan carente de rigor periodístico como nutrido de la acidez y el brillo con los que el saxofonista recuerda aquellos años.

Jalil, en cambio, establece una respetuosa distancia. “Nunca tomé una ginebra con Luca”, destaca desde el prefacio, toda una declaración de principios. Su mirada de Prodan es profunda, sincera y, a fin de cuentas, propia de quien abordó la tarea de conocerlo por el camino más largo: el de la investigación.

En el anaquel

- Salamandra reeditó la exitosa saga protagonizada por Percy Jackson, el hijo del dios Poseidón que afronta numerosas misiones propias de una mitología griega recreada en plena modernidad. De la pluma de Rick Riordan ya están disponibles “El ladrón del rayo”, “El mar de los monstruos” (ambas llevadas al cine), “El último héroe del Olimpo”, “La batalla del laberinto” y “La maldición del Titán”. Novelas infanto juveniles para disfrutar.

- Elrubius vuelve a las librerías, esta vez con “Virtual Hero”. El  youtuber con más seguidores protagoniza este cómic inspirado en videojuegos. Allí explora mundos diversos, combate contra criaturas hostiles y supera pruebas imposibles. De paso, se da el gusto de salvar a la chica de sus sueños. Convertido en un héroe del mundo gamer, Elrubius sigue apostando por la más difícil de las misiones: transitar entre la dimensión virtual y el mundo real.

- “Los instrumentos del mal”, de Imogen Robertson, es un policial ambientado en la Inglaterra de fines del siglo XVIII. Hay un crimen y las pistas apuntan a la familia del conde de Sussex. Investigan una mujer y su huraño e inteligente vecino. 

Siempre entre los más vendidos

-Tras un breve coqueteo con el policial negro, la consagrada chilena Isabel Allende recupera su sello romántico en “El amante japonés”. La novela retrata los vaivenes del amor tardío, la declinación de la juventud y las secuelas que las guerras dejan en las sociedades. Una chica llamada Alma Velasco y el jardinero japonés Ichimei Fukuda son los protagonistas de la historia. Se conocieron siendo muy jóvenes, en plena Segunda Guerra Mundial, y el reencuentro, ya adultos, incluirá una variante erótica que se mantiene en la clandestinidad por los mutuos compromisos amorosos de cada uno. 


CUATRO LIBROS PARA ENAMORARSE DE MARTE


“Cónicas marcianas”, de Ray Bradbury 

Imprescindible clásico de la mejor sci-fi. Los relatos construyen una cosmogonía marciana nunca igualada.


 “Podemos recordarlo por usted”, de Philip K. Dick

Colonizado y fascinante, Marte aguarda a Douglas Quail, quien busca respuestas sobre su pasado. ¿Es un sueño o es real?

“Una princice de Marte”, de Edgar Rice Burroughs

De una cueva y en pleno siglo XIX, misteriosamente, John Carter pasa a Marte. Allí emprenderá épicas batallas.

“Las arenas de Marte”, de Arthur C. Clarke

Es la lucha de un grupo de colonizadores por hacer del planeta rojo un lugar amigable... y habitable.